Los sistemas de líneas de vida horizontales se utilizan sobre todo en tejados planos u otras superficies planas para proporcionar protección contra caídas. Este sistema se basa en puntos de fijación individuales conectados con un cable de acero inoxidable. Los distintos puntos de fijación se diferencian en soportes finales y soportes intermedios.
Para garantizar que la fuerza sobre el suelo no sea demasiado elevada en caso de caída, hay que instalar una y otra vez limitadores de fuerza. Estos garantizan que las fuerzas que actúan sobre el subsuelo sean limitadas y, por tanto, para aún más seguridad y buena tensión.